Con la creciente atención y la urgencia de reducir el impacto medio ambiental, las empresas de la industria del petróleo y el gas se enfrentan a retos cada vez mayores como principales emisores de gases de efecto invernadero. Sin embargo, con el aumento de la demanda de energía en todo el mundo, ¿cómo podrán las empresas del sector energético lograr un cambio tangible y medible en consonancia con el objetivo de emisiones netas cero para 2050?
Actualmente, las naciones y las empresas de todo el mundo deben participar activamente en actividades e iniciativas que fomenten la protección del medio ambiente y, por tanto, el futuro de las sociedades. De ahí que se desarrollen prácticas más sostenibles y rentables. Tales iniciativas significan trabajar para crear un sistema energético híbrido que pueda satisfacer la creciente demanda de energía de los consumidores y, al mismo tiempo, sea más sostenible. En pocas palabras, reevaluar sus modelos de la industria del petróleo debe optimizar sus procesos actuales.
Sin embargo, para cumplir con dicha labor, las empresas deben revisar cualquier tecnología que permita aumentar las tasas de captura de carbono, involucrando un análisis detallados de los yacimientos; el mantenimiento y el funcionamiento de los generadores, los inyectores, los equipos y los sistemas; la supervisión, la optimización y otros factores de producción. La importancia de esto radica en que, a través de la tecnología, las empresas podrán satisfacer de manera eficiente y óptima las necesidades globales de la industria petrolera.
Por ejemplo, la digitalización de los procesos se ha convertido en una herramienta para que las empresas de petróleo y gas desarrollen prácticas más sostenibles al tiempo que aumentan la productividad. La maquinaria de petróleo y gas está cada vez más tecnificada, interconectada y cambia rápidamente lo que se considera «normal y esperado». Los productos ofrecen ahora sensores, automatización y servicios de conectividad que permiten seguimiento de la producción, controlan las necesidades de mantenimiento de los equipos e identifican cualquier causa de preocupación tan pronto como aparece.
Además, el uso de algoritmos ayuda a rastrear las variables más relevantes para la operación y las soluciones de conectividad. Estos sistemas utilizan una combinación de soluciones que pueden realizar automáticamente tareas complejas y alimentar una base de datos central. Estos son ejemplos de cómo la digitalización de los procesos puede allanar el camino hacia prácticas más eficientes y respetuosas con el medio ambiente y afrontar el reto de la descarbonización.
En líneas generales, la transición a fuentes de energía y métodos de producción renovables se considera cada vez más una opción viable para crear un sistema de producción con bajas emisiones de carbono y lograr una vía de desarrollo más sostenible desde el punto de vista económico. En Nakasawa Resources, estamos comprometidos con el desarrollo de soluciones tecnológicas innovadoras que ayuden a aumentar la eficiencia de nuestros clientes y a reducir los costes operativos en la aplicación de la inyección de vapor. Nuestros sistemas Super Matroid Heater (SMH) y Super Matroid Cyclone (SMC) tienen el potencial de responder a las futuras barreras normativas estatales para los procesos de extracción de petróleo. Además, estos innovadores sistemas no generan residuos ni efluentes que puedan dañar el ecosistema o el medio ambiente donde se realizan las operaciones de inyección de vapor.
Además, como empresa, buscamos impulsar la transición energética segura y sostenible a partir del reparto de riesgos, respondemos a las tendencias y retos del mercado y adoptamos nuevas tecnologías para optimizar la producción. La tecnología implantada en el SMH y el SMC ofrece beneficios medioambientales y cumple con éxito el reto de la descarbonización. Como garantizar que el suministro de calor programado se realice bajo un estricto control de las emisiones de gases de efecto invernadero. Además de garantizar el ahorro en la operación, el suministro de combustible y gas, y el uso de agua tratada.
A través de nuestros SMH y SMC, apuntamos a optimizar la recuperación para minimizar el impacto ambiental, haciendo que los proyectos sean más rentables de una manera socialmente responsable. Gracias a su avanzada tecnología, los SMH y SMC incentivan una mayor producción de petróleo, reduciendo los costes mediante procesos robustos, más duraderos y rentables.
En conclusión, la descarbonización de la industria del petróleo y el gas será un reto importante debido a los elevados requisitos de capital, la alta competencia, las políticas medioambientales incoherentes y la aceptación pública de los cambios en el uso de la energía. No obstante, las empresas debemos desarrollar vías de descarbonización e integrar los principios de la economía circular en sus modelos de negocio. Por último, centrarse en el diseño de sus procesos con criterios de sostenibilidad que permitan alternativas más eficientes y respetuosas con el medio ambiente.